La judoca venezolana de deficiencia auditiva Mayerlyn Barreto, inició su camino por el deporte siguiendo los pasos de su hermana Ysis Barreto, y gracias a esta motivación, hoy acumula cinco participaciones en el escenario sordolímpico, además de un registro de cinco medallas divididas en una de oro y cuatro de bronce.
La atleta de 42 años de edad se involucró desde pequeña en las artes marciales, porque su padre, Álvaro Barreto, fue instructor de Kung Fu y selección de Miranda, pero no fue esta disciplina de origen chino que la atrapó.
«De mi padre tengo el amor por el deporte y de mi hermana la pasión por el judo, ambos son los encargados de que esté triunfando en el mundo deportivo», reveló la mirandina.
Primera en todo
Aunque Barreto en su niñez fue medallista de oro escolar de atletismo, también practicó otras disciplinas como natación, taekwondo, kickingball y lucha.
«A mis profesores les llamaban mucho la atención mi rendimiento deportivo, ya que siempre quedaba en los primeros lugares de cada competencia y en cada disciplina», detalló la medallista sordolímpica.
Hace 30 años, Barreto visitó el Club de Judo del Palacio del Deporte, donde conoció a su actual entrenador, su paisano, Ovidio Almeida, quien también entrenó a sus hermanas Ysis y Eillín Barreto.
«El sensei Ovidio en esa oportunidad dijo que mi deficiencia auditiva no era impedimento para ser una gran judoca, gracias a él y a sus enseñanzas me han ayudado a conquistar grandes logros», expresó.
Debut triunfal
Barreto asistió a su primer escenario sordolímpico en la edición de China Taipéi 2009, donde conquistó oro en la categoría de -57 kg; cuatro años después sumó un bronce en Sofía, Bulgaria, y repitió el mismo mentan en Samsun, Turquía 2017 y Caxias Do Sul, Brasil 2022.
A este palmarés se le suma ahora el bronce de Tokio 2025, donde dominó el combate por el tercer lugar ante la ucraniana Sofiia Volianiuk por la vía del ippon.
Respaldo absoluto
La opción de retirarse de la actividad está muy lejos de sus pensamientos, pues Barreto tiene en mente seguir combatiendo para competir en sus sextas sordolimpiadas.
”El deporte me ha beneficiado en muchos sentidos: en mi salud física, en el desarrollo mental y también económicamente. Gracias al judo he conocido casi todo el mundo, y por eso estoy agradecida”, indicó.
La mirandina reconoció el apoyo del presidente de la república, Nicolás Maduro, a través del ministro del deporte Franklin Cardillo, por el acompañamiento durante los diez meses de concentración, además del apoyo para participar en las diferentes competencias internacionales.
Anakarina Pereira / Prensa Mindeporte, Tokio
Fotografía: Alexis Torrealba






